El inicio de la Liga fue pésimo en la línea defensiva y en la efectividad cara a gol y se perdieron las dos primeras jornadas ante dos equipos teóricamente inferiores como Las Palmas (2-4) y Eibar (1-0). Los graves problemas defensivos los trató de corregir el director deportivo Suso García Pitarch reuniéndose con Jorge Mendes antes del cierre del mercado de fichajes y cerrando las llegadas de sus dos centrales Garay y Mangala (que cubrirían las bajas de Mustafi, traspasado por 41 millones al Arsenal, y de Vezo, cedido al Granada).